Hace algunas semanas dedicamos un artículo a brindarte algunos tips para enfrentar una entrevista laboral. Ahora, vamos a profundizar sobre los tipos de entrevistas con las que te podés encontrar y las particularidades de cada una de ellas.
Entrevista individual. Es la más común, o quizás la primera que se nos viene a la mente cuando nos referimos al tema. La organización cita a un candidato o candidata pero del lado de la misma pueden participar uno, dos o más integrantes (en este último caso, es conveniente que tengas en cuenta dirigirte y hacer contacto visual con todos). El objetivo es conocer en profundidad a cada postulante para determinar si es la persona indicada para el puesto, o bien realizar una pre-selección. Pero recordá que también es tu oportunidad de obtener los datos claves para analizar si el empleo que te ofrecen cumple con tus expectativas (en cuanto a tareas, horarios, salario, etc.).
Entrevista grupal: Participa más de un postulante y posiblemente más de un entrevistador. Generalmente tienen por finalidad observar cómo interactuas al interior de un grupo, para lo cual habitualmente se plantean distintas situaciones problemáticas. Es importante que recuerdes que en las mismas no se destaca el postulante que habla más ni el que impone su punto de vista. La capacidad de escucha, de exponer claramente tus ideas y argumentos, y de intentar llegar a acuerdos mediando entre distintas alternativas son las actitudes que se evaluarán positivamente en esta instancia. Te enfrentarás también al desafío de mantenerte enfocado y de actuar con naturalidad, aun cuando estés siendo observado por varias personas de la empresa.
Entrevista con pruebas psicotécnicas: Esta entrevista se realiza con el objetivo de explorar tus capacidades, características personales (forma de razonamiento, habilidades para resolución de problemas, etc.) y conocimientos mediante la utilización de test, cuestionarios, preguntas multiple choice, dibujos, etc. Generalmente están a cargo de un especialista (psicólogo o licenciado en recursos humanos) y es común que la misma se divida en distintas etapas o instancias, con un tiempo limitado para la finalización de cada una. Si bien en algunos casos el entrevistador suele proveer a los participantes de los materiales necesarios, siempre llevá al menos lapicera. Es fundamental que administres bien el tiempo, que te asegures de comprender bien las consignas antes de responder y que lo hagas a conciencia. Tené presente, además, que estas entrevistas suelen requerir más tiempo que las otras (1 a 2 horas aproximadamente) y es común que se agrupen a varios postulantes para realizar en simultáneo la misma.
Entrevistas telefónicas: Algunas empresas las utilizan para realizar un primer filtro de los postulantes o para comprobar la buena dicción y/o el manejo de determinado idioma si el puesto lo requiere (por ejemplo, para selección de telemarketers). Generalmente son breves y se realizan preguntas bien concretas. Tené presente que, si bien no hay un contacto cara a cara, tu tono de voz puede hacer la diferencia. Por ello, procurá responder con claridad y seguridad.
Entrevistas que implican el uso de nuevas tecnologías: Los desarrollos tecnológicos de los últimos años han modificado, entre tantas cosas, algunos mecanismos de selección de personal. Cada vez son más las organizaciones que realizan entrevistas a postulantes vía remota, mediante recursos como Skype, por ejemplo. Tienen la ventaja de que podrás realizarlas sin moverte de tu casa pero requieren sí o sí del acceso a esta tecnología. Y es importante que tengas en cuenta algunas cuestiones: utilizá un usuario y foto de perfil discretos; verificá antes tu conexión a Internet y el buen funcionamiento de la aplicación; cuidá tu aspecto personal tanto como si la entrevista se realizara cara a cara; prestá atención a detalles como lo que se pueda ver de fondo, la iluminación y los sonidos del ambiente. Finalmente, cumplí con el requisito de puntualidad que, en este caso, es el horario acordado para conectarse. Este tipo de entrevistas suelen ser elegidas por cuestiones de distancia o cuando uno de los aspectos a evaluar es el dominio de estas herramientas tecnológicas.
Los procesos de selección más complejos y que se prolongan en el tiempo suelen combinar algunas de las distintas tipologías que acabamos de desarrollar, o bien todas. Por eso, esperamos que puedas aprovechar al máximo esta información ¡Hasta la próxima!